Wednesday, February 12, 2014

Tío José Luis Espada Orlandi

31 de Mayo de 1921 al 26 de Enero de 2014 
El domingo 26 de enero del 2014 al medio día nuestro querido tío, José Luis Espada Orlandi falleció. Le sobreviven su hijo Anthony (Tony) y su esposa Iraida; su hija Evelyn y su esposo Angel y su hija Linda Espada. Tambien sus nietos Jose Luis (Pepe Luis), Jenny, Esteban, Teresa y Isabela.   

De sus hermanos solo le sobreviven su hermana mayor Josefina Espada vda. de Morales y su hermano menor Kelvin Emerson Espada.

Papillo, Mamilla, José Luis y Josefina


José Luis nació en La Romana, República Dominicana durante el viaje misionero de quien fue su padre el Rev. Espada Marrero. De los 8 hijos del reverendo y su esposa Josefina 4 nacieron en la República Dominicana, José Luis, Samuel Leocadio, Ismael Francisco y David José; hubo un varoncito que nacio en Puerto Rico pero a los 11 meses de nacido fallece en la República Dominicana, Eduardo Alfredo.

Tío José Luis fue un ser apasionado de la vida en todo el sentido de la palabra. Entre todas sus pasiones se destacaron su pasión a la familia y pescar mar a fuera. Su pesca predilecta, a mi entender, lo era el "Chillo". 

Me acuerdo una tarde que yo había llegado de la escuela en casa de Papillo, ya que mami y papi no habían llegado del trabajo, llega tío José Luis y le dice a Mamilla, mami, con un beso, un abraso y con la bendición, aquí tienes unos chillos. Saco unos pocos de la nevera portátil y se los dio. Yo, curioso, miro dentro de la nevera portátil, esta estaba repleta de chillos con los ojos brotao.

En otra ocasión Tio llevo a Trucutu, Pichu y a Keve a pescar chillo. Mientras tio preparaba la lancha nos hablaba de lo que podíamos hacer y lo que no podíamos hacer. Entonces él nos pregunta quien de ustedes se marea? Ninguno dijo na porque sabíamos que el que dijera que se mareaba se quedaba en tierra hasta que regresaran de pescar. Ninguno estaba dispuesto a ser el has me reír de los demás y los primos teníamos fama de sacar le punta a cualquier situación. Así salimos y en camino al punto de pesca tio nos mira, parece que él noto algo en nuestros rostros y nos dice, el que me vomite en la lancha la va tener que lavar de arriba a bajo, mejor te agarras de la baranda y lo hechas fuera del bote y viento abajo. Así era él, difícil pero cariñoso a su manera. De esto yo puedo hablar por que desde que tengo memoria fui blanco de su jocosidad.y no empece a esto le quise mucho y busque su consejo. El que yo me acercase a el para consejo, pocos en la familia lo saben y posiblemente no me lo han de creer. Cuantas veces le pedí ayuda, el me ayudo.   
 

Tio siempre estarás en nuestra memoria y no te olvidaremos. 
Tu sobrino, El Keve
12 de febrero de 2014

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